Esta es la parte 2 de 2 entradas relacionadas con las características de un emprendedor. Puedes leer la parte 1: Y tú, ¿qué tipo de emprendedor eres?
Si eres emprendedor es porque tienes una personalidad como pocas personas, pero muy importante para la sociedad donde vivimos.
Las estadísticas hablan por sí mismas: las Pequeñas y Medianas Empresas producen el 52% del Producto Interno Bruto y cerca del 72% del empleo en México. Esto se debe gracias a gente como tú, que decidió llevar a cabo una hazaña de emprendimiento.
El éxito de tu empresa y de sus finanzas es muy deseable para la comunidad, por los beneficios que aportas para el desarrollo de tu ciudad, estado y país.
Debes tener razones para sentirte orgulloso pero también es importante estar alerta, ya que nuestra forma de ser como propietarios de un negocio puede determinar su éxito o fracaso.
¿Cuáles son las fortalezas de los emprendedores?
Son audaces y directos: para los emprendedores no hay mejor que romper barreras y descubrir nuevas cosas e ideas para ser mejores. También prefieren comunicarse con claridad y ser directos, ¡las cosas como son!
Son racionales y prácticos: ante las nuevas ideas te gustan las cosas concretas y al grano por lo que si alguna junta o discusión se vuelve divagante, sientes que podrías aprovechar tu tiempo en otras cosas.
Les gusta la originalidad: suelen mirar un problema desde varios ángulos hasta encontrar su solución y no temen aplicar nuevos puntos de vista.
Son muy perceptivos: los emprendedores pueden ver cuando las cosas necesitan un cambio para abrir nuevas posibilidades. Les gusta aprender y por lo mismo son grandes observadores de cómo son las personas y cómo conectar con ellas en caso de buscar alianzas o negocios.
Son sociables: como líderes usan las interacciones sociales para crear nuevas oportunidades o formar redes de trabajo.
¿Cuáles son sus debilidades?
Tener vocación para emprender implica una gran fortaleza de la personalidad pero la otra cara de la moneda son las debilidades que pueden sufrir.
Pueden parecer distantes: vivir en la realidad y en el presente es muy importante para los emprendedores. La emotividad puede incomodarlos, especialmente en el contexto profesional, ya que prefieren ser directos y muy racionales al momento de tomar una decisión de negocios.
Pueden ser impacientes: la costumbre los hace buscar siempre nuevas ideas o acciones para cambiar y mejorar. Sentir que no se avanza por personas que no siguen su ritmo puede causarles mucha frustración.
Pueden perder la “visión del largo plazo”: con la visión siempre en el “aquí y ahora” pueden perder la perspectiva.
Pueden ser desafiantes: a veces los emprendedores se rebelan contra las reglas y las limitaciones, su personalidad siempre en acción los hace aburrirse con trámites o procesos que consideran inútiles o poco estimulantes.
¿Tienes la personalidad de un emprendedor exitoso?
De acuerdo a varios estudios de psicología, los rasgos de personalidad de una persona emprendedora y exitosa son los siguientes:
Tienes un alto locus de control
Crees que los resultados dependen de ti y por eso le dedicas tiempo y esfuerzo a tus metas, eso hace que te muevas en dirección a tus objetivos y generes éxito a tu paso.
Crees en la autoeficacia
Tienes la convicción de que puedes organizar y ejecutar las acciones que necesitas para generar los resultados requeridos. Te sabes competente para realizar un trabajo concreto, sin embargo, sabes reconocer cuando una meta es inalcanzable con tus medios. Usas la autoconfianza para actuar y motivar acciones para llegar a los resultados que esperas y sabes alcanzables; esto es un claro rasgo de un emprendedor exitoso.
No le temes al riesgo
Tu personalidad te permite asumir riesgos, consideras alternativas aunque éstas puedan llevarte a resultados inesperados. Sin embargo, esto no significa que vivas al límite y sin preocuparte de tus decisiones. Esta cualidad te ayuda a no temer al emprendimiento porque al final cualquier proyecto siempre tendrá un margen de riesgo.
Además no te conformas con ser parte de una empresa o con un puesto directivo; las personas con este rasgo de la personalidad buscan siempre aventuras que los haga destacar, creen en autoemplearse para generar sus propias oportunidades de éxito.
Eres proactivo
Tienes tendencia a iniciar acciones aunque éstas cambien el ambiente en el que haces negocios. Sabes identificar oportunidades y actuar en torno a ellas. Tienes iniciativa y perseverancia para lograr los resultados que buscas.
Contar con esta cualidad es indispensable en la vida de un emprendedor exitoso, ya que te permite adaptarte y asumir la responsabilidad en todo momento. Significa que tu radar de oportunidades está en modo ON todo el tiempo.
Ser proactivo es un importante catalizador de tu potencial como emprendedor.
¿Sabes cómo aprovechar tus habilidades como emprendedor para crecer?
Tu personalidad te ha permitido crear un negocio y por lo tanto debe también ser tu mejor arma para crecer. Recuerda que un buen emprendedor enfrenta sus opciones con la seguridad que le da tener planeación y un conocimiento a fondo de las finanzas de su negocio.
Puede llegar un momento en que la oportunidad de un crédito se presente como el camino hacia un gran futuro, todo depende que sepas bien tus objetivos y desde donde partes para lograrlos.